Foto tomada de media.elnuevoherald.com
Desconfianza es no creer en las capacidades de una persona, grupo, empresa, organización, etc, para desarrollar y ejecutar una tarea con resultados positivos o al menos con las expectativas (no mediocres) de quienes se ven afectados por la realización de ésta.
Un ejemplo sencillo: en una empresa el jefe le asigna a uno de sus empleados un balance y una presentación (entiéndase por esto diapositivas en Power Point) para presentarlo. El trabajador cumple con su tarea, pero al momento de mostrársela a su jefe éste se muestra disconforme y le solicita correcciones. Y se repite la acción varias veces.
El empleado no dejó escapar ningún detalle de contenido y lo sintetizó muy bien, simplemente su jefe consideró que para mostrar los datos se podía hacer de otra manera, es decir no se cumplieron las expectativas del jefe en torno a la presentación, que no estaba mal. Las cosas se pueden transmitir de mil maneras correctas. Cosa contraria sucede cuando se ejecuta una acción con mediocridad (ni resultados positivos, ni expectativas).
El empleado no dejó escapar ningún detalle de contenido y lo sintetizó muy bien, simplemente su jefe consideró que para mostrar los datos se podía hacer de otra manera, es decir no se cumplieron las expectativas del jefe en torno a la presentación, que no estaba mal. Las cosas se pueden transmitir de mil maneras correctas. Cosa contraria sucede cuando se ejecuta una acción con mediocridad (ni resultados positivos, ni expectativas).
Por supuesto que la desconfianza se aplica al béisbol de las Grandes Ligas y para nuestro caso a los Yankees de Nueva York, pero con una sola expectativa y un claro resultado positivo: ganar la Serie Mundial, el anillo 27 de la historia de la franquicia.
Para cumplir ese objetivo, la novena que dirige Joe Girardi ha dado confianza en el 'hay con qué': series en las que el pitcheo funciona, lo mismo que el bateo y la defensa. No es decir "hay nómina", sino que sus integrantes cumplan con su papel en el 'diamante', muestren que soñar con el campeonato se puede convertir en una realidad.
La desconfianza se encuentra en que el equipo por momentos juega mal, deja a un lado la regularidad y con la opción de complicar sus aspiraciones: se ve en la lucha divisional con los Medias Rojas de Boston. En otros términos, se confía en el 'hay con qué', pero no en los 'bajonazos' del equipo, y más en este momento cuando restan dos meses para concluir la temporada regular del 2009.
No se trata de ganar todos los partidos, es imposible, el problema está en cómo se pierden y que venga una mala racha. Un caso de hace poco: los Yankees cayeron tres partidos de cuatro en Chicago con los Medias Blancas por una mala defensa el jueves y los lanzadores se vinieron abajo el viernes y sábado. Cambiaron completamente la imagen luego del 9-1 en Yankee Stadium y ganar una serie en Tampa Bay.
Hinchas de los Yankees, no vamos a concluir que luego de Chicago todo se vino abajo, no. Todo se basa en que después no se tengan que hacer cuentas de "se jugó la mayoría de la campaña bien, pero si hubiéramos ganado acá... ".
Lo que viene: sé que la mente está puesta en la serie con los Medias Rojas en Yankee Stadium, pero antes esperan en Toronto los Azulejos para dos encuentros. Calma...
Let's go Yankees!
Hinchas de los Yankees, no vamos a concluir que luego de Chicago todo se vino abajo, no. Todo se basa en que después no se tengan que hacer cuentas de "se jugó la mayoría de la campaña bien, pero si hubiéramos ganado acá... ".
Lo que viene: sé que la mente está puesta en la serie con los Medias Rojas en Yankee Stadium, pero antes esperan en Toronto los Azulejos para dos encuentros. Calma...
Let's go Yankees!
¡Todos por el camino 27!
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